Durante la visita de Benedicto XVI a Alemania, el 23 de septiembre pasado, manifestantes presentaron retratos de personas presuntamente abusadas por sacerdotes católicos en ese país. Foto: Alex Domanski/ Reuters |
BRUSELAS, Bel.- A la edad de 12 años, San Deurinck fue abusado sexualmente por dos sacerdotes católicos. «El primero trató de tocar mis genitales, lo que fue extremadamente extraño para mí. Esa vez me lastimó (…) El segundo trató de poner su dedo en mi ano. No lo logró, pero fue muy doloroso», recuerda el hombre que ha cargado con su pena durante 53 años. Los abusos de los que fue víctima ocurrieron en el internado católico al que asistió entre 1950 y 1960. A la fecha, con 65 años, Deurinck vive retirado en Amberes después de trabajar por décadas como dependiente de una tienda. Con el tiempo, este hombre de mirada triste dice, como muchos otros belgas, haberse librado de la religión: «Me volví un arrogante libre-pensador ateísta, pero no pude liberarme del influyente abuso de la Iglesia». (más…)